Con esta intervención se ha conseguido disminuir el impacto acústico de esta zona residencial provocado por la autopista
Iván Sevillano «Esta obra era imprescindible para mejorar las condiciones de vida de los vecinos y vecinas que viven cerca de la Ma-1, y que estaban sufriendo, desde hace muchos años, una intensidad de ruido muy elevada. Se trata, por lo tanto, de una actuación de salud pública»
El conseller de Mobilitat i Infraestructures, Iván Sevillano, ha visitado hoy Portals para anunciar el final de las obras de instalación de pantallas acústicas en la calle de Hostalets, en Calvià, una actuación que, en palabras de Sevillano, tenía como objetivo «disminuir el impacto acústico de la zona residencial de Hostalets en Calvià, concretamente, de la barriada en torno a la calle Hostalets, donde viven centenares de personas. Con obras como esta, que se suman a otras intervenciones similares como la que hicieron hace unos meses en la zona de Son Caliu, hemos solucionado de manera global los problemas acústicos provocados por la autopista que perjudicaban la calidad de vida de los residentes de la zona. Cerramos el círculo». A esta visita al final de las obras también han asistido a la directora insular de Infraestructures, Olga Martínez; Juan Recasens, teniente de alcalde de Servicios Generales e Infraestructuras; Alfonso Molina, concejal de Mantenimiento y Marga Plomer, concejala de Participación Ciudadana del consistorio calvianer.
La intervención ha consistido en instalar pantallas acústicas fonoabsorbentes de 5 metros de altura. La longitud de la actuación de la instalación de pantallas ha sido de 540 metros lineales.
Hay que recordar que para redactar el proyecto final, se estudiaron detenidamente las condiciones de la propagación y de impacto acústico del entorno para intervenir, de la manera más eficiente. Se estudiaron así varias alternativas, y se llegó a la conclusión de que la medida más eficaz era la de las pantallas acústicas fonoabsorbentes en los márgenes de la misma autovía, y teniendo en cuenta la distancia con las viviendas y la carretera. «Además, nos hemos asegurado de que la colocación de las pantallas no ha supuesto un aumento del impacto acústico en las viviendas situadas en el otro lado de la autovía, porque también queríamos asegurar que las pantallas que hemos instalado no los perjudicaran, y así lo demuestra el estudio del impacto acústico desarrollado», ha apuntado el conseller Sevillano.
«Esta intervención -ha concluido Iván Sevillano- era prioritaria para mejorar las condiciones de vida de los vecinos y vecinas que viven cerca de la Ma-1, y que estaban sufriendo, desde hace muchos años, una intensidad de ruido muy elevada a causa de los vehículos que pasan cada día por la autopista. Antes de esta actuación, los vecindarios estaban sufriendo un ruido muy elevado, un nivel de decibelios por encima de los recomendados por la Organización Mundial de la Salud. En horario diurno subían los 70 decibelios y por la noche, subían a los 55 decibelios. Ahora, hemos conseguido descender más de 15 decibelios en cada uno de los casos y el umbral del ruido ya se encuentra dentro de los límites que la OMS considera como aceptable. Se trata, por lo tanto, de una actuación de salud pública».
La duración de las obras ha sido de ocho meses y el presupuesto de adjudicación fue de 717.608,00 euros.