Los socialistas de Calvià han manifestado que han acompañado este sábado a los vecinos de Portals en la convocatoria, organizada por diversas entidades de la zona, para manifestar su disconformidad con el proyecto que la Parroquia de Portals y el Obispado quieren llevar a cabo en los terrenos protegidos del Oratori de Portals.
En este enclave, con un balcón natural al Mediterráneo y de un elevado valor social y sentimental para los calvianers, está prevista la construcción de un restaurante con dos niveles, en la línea del acantilado y mirando al mar, además de la reforma del espacio anexo a la ermita del Oratori. Todo ello, explican los socialistas, vendrá acompañado de una ampliación de la calle Blanes y la habilitación de nuevos aparcamientos en la zona.
El secretario del PSOE de Calvià, Alfonso Rodríguez Badal, ha declarado que “estos terrenos se definen ahora en el Plan General de Calvià como Área de respeto y control y Área de delimitación del conjunto de arquitectura religiosa” y, por ello, “hemos de respetarlos como se merecen”.
El grupo socialista municipal ya se reunió con los vecinos preocupados por este tema hace unos meses, concretamente el día 4 de noviembre. Los vecinos habían solicitado información sobre esta iniciativa a través del registro del Ajuntament de Calvià, pero no obtuvieron respuesta, según explican desde el PSOE. Cuando, finalmente, los vecinos constataron que el restaurante era un proyecto firme obtuvieron una copia del mismo, cuya tramitación se inició en diciembre.
[colored_box color=»eg. green»]Solicitan su protección[/colored_box]
Ahora, es necesario un informe preceptivo de la Conselleria de Turismo, que justifique la ampliación de la superficie propuesta, en cumplimiento de la Ley de Turismo aprobada en 2012, aclaran los socialistas. “Parece ser que Turismo dará su conformidad, pues la Ley turística del PP permite estos desmanes”, aseguran, “nosotros pedimos al gobierno municipal que aplique el Plan General y proteja el Área de delimitación de este conjunto de arquitectura religiosa”, un enclave que el Marqués de la Romana cedió al pueblo de Calvià a mediados del siglo XIX, afirma Rodríguez Badal.
“Calvià necesita respetar los escasos puntos del litoral que aún se muestran libres al mar y Portals está sufriendo ahora una presión insoportable”, afirma. “Desde el complejo hotelero en la Calita, pasando por la explotación de sus pequeñas playas residenciales y el desorbitado proyecto de los 100.000 metros cuadrados anexos al colegio Ágora, hasta llegar a amenazar la paz de este maravilloso entorno del Oratori de Portals”, concluye.
