Aquella imagen del póker como un juego que tiene lugar en antros entre personas de dudosa reputación, ya ha pasado a la historia. Hoy son los jóvenes con un intelecto medio-alto, que tienen un buen feeling con las matemáticas y dominan el cálculo de probabilidades, quienes mandan en los tapetes.
Los mallorquines no han sido ajenos a esta circunstancia y debe ser por ello que en los últimos años son varios los que compiten en las mesas de póker al más alto nivel. El secreto, saber adaptarse a los tiempos, trabajar duro en todo lo referente tanto al estudio del juego como a la estrategia y tener claro cual es el lugar de cada uno en cada momento. Y es que sin duda, la principal clave para llegar lejos suele estar directamente relacionada con el hecho de progresar sin prisas y con paso firme.
Foto: PokerStars
Tomeu Gomila ‘Amatos‘ sabe muy bien de que va esto, no en vano ha sido uno de los pioneros en la isla a la hora de embarcarse en esta aventura del póker moderno que le ha llevado a sentarse en las mejores mesas del planeta. Experiencias que infinidad de ocasiones ha compartido a través de las redes sociales en forma de consejos para formar nuevos jugadores.
A partir de que en el año 2006 diera el salto desde jugador recreacional en la búsqueda de retos mayores, Amatos se convertía en uno de los competidores más importantes de nuestro país, cuajando actuaciones destacadas en diversos eventos de póker, tanto nacionales como fuera de nuestras fronteras. En 2008 lograba el triunfo en un evento del European Poker Tour celebrado en Barcelona y un año más tarde firmaba un extraordinario 5º puesto en el Evento Principal del mismo festival, alcanzando el mayor premio de su carrera en un torneo en vivo con 185.000 euros.
Otro mallorquín que lleva un buen tiempo peleando con la baraja francesa es Gerard Rodríguez, más conocido en las mesas por ‘GeradX’. En su día decidió abandonar su carrera de Químicas para dedicarse al póker a tiempo completo y a fe que no le ha ido nada mal.
A raíz de ganar una etapa durante el Campeonato de España (CEP) en 2008, Gerard Rodríguez lograba el patrocinio de una sala y enfrentaba con más garantías lo que aún estaba por llegar. Poco a poco se fue convirtiendo en un habitual de los mejores torneos nacionales logrando una segunda victoria en el CEP y una amplia lista de premios tanto, en torneos en vivo como en línea.
A través del Grupo GeradX y junto a su pareja Rocío Peña, también jugadora de póker, ha dedicado una buena parte de su tiempo formando a nuevos jugadores en la estrategia y las matemáticas aplicadas al póker.
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Otro destacado componente de la armada mallorquina de póker es Juan Miguel Tomé. ‘Tocalasam’, como también se le conoce en las mesas virtuales, comenzó un poco más tarde en el póker, pero solo necesitó de un par de años de experiencia para llevarse en Madrid un título del añorado Estrellas Poker Tour de 2012, el circuito de póker con más prestigio que ha existido a nivel nacional, que ponía punto y final a su andadura hace casi ya cuatro años.
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Y claro, no podíamos terminar esta relación de jugadores de la isla sin nombrar a Fernando Pons, protagonista de la mayor hazaña del póker mallorquín. Imposible no recordar al tercer jugador capaz de convertirse en November Nine en la historia del póker español, es decir, en llegar a disputar nada menos que la mesa final de nueve jugadores de las World Series of Poker (WSOP) en Las Vegas.
Hasta ese momento tan solo lo había logrado Carlos Mortensen, que terminó llevándose el título en 2001 y Andoni Larrabe, quien terminara 6º en 2014. Pons acabó el torneo en la novena plaza, pero nadie jamás le podrá arrebatar la increíble sensación de sentarse en aquella prestigiosa mesa para dirimir quien era el mejor en el torneo más popular del planeta, ni el millón de euros de premio que recibió por tal hazaña. Y todo ello tras lograr su clasificación para disputar dicha edición las WSOP al imponerse en un torneo online de 30 euros.
