La AMIPA del CP Xaloc de Peguera no se conforma con un ‘no’, y sus niños tampoco.
Un gran rastrillo infantil consiguió gran parte de los fondos necesarios para renovar los útiles de atletismo, engrosar la bolsa para el viaje a Port Aventura del grupo de Sexto e incluso colaborar en el presupuesto previsto para el campamento que harán los más jóvenes esta primavera.
Entre otras iniciativas, han vendido todos los boletos para la rifa de una moto y de un fin de semana en un hotel de cuatro estrellas en Asturias. El sábado del rastrillo, vendieron refrescos y deliciosas cocas caseras.
Los refrescos sin abrir que no se pudieron vender fueron devueltos al supermercado, con el que previamente tenían un acuerdo, y así nadie perdió nada.
Realmente, están creando grandes emprendedores con un futuro muy prometedor.
Por Blanca Garau