Calvià 2000 gestiona 315 bombas de impulsión, que empujan el agua a través de 74 estaciones de bombeo y las cuatro depuradoras
Los costes anuales de mantenimiento y la inversión realizada en los sistemas de impulsión supera los 1,8 millones de euros
Durante la temporada turística, todas las instalaciones de la red de saneamiento de Calvià se encuentran a pleno rendimiento. Una función esencial de este sistema es la impulsión, ya que el agua residual se genera fundamentalmente en las zonas de costa y debe bombearse hasta las estaciones depuradoras, con el objetivo principal de depurarla para poder devolverla al medio ambiente con la máxima calidad posible y evitar cualquier tipo de vertido al mar.
En verano, la compleja red de estaciones, bombas y centros de bombeo de agua residual impulsa toda el agua recogida por las redes de alcantarillado, transportando 28 millones de litros cada día hasta las depuradoras, siendo las horas del día con mayor volumen de bombeo las comprendidas entre las 8 y las 10 de la mañana, y entre las 6 de la tarde y las 10 de la noche.
El nervio del sistema son las bombas impulsoras. Hasta 315 máquinas trabajan sin parar bajo el nivel del suelo, distribuidas en las cuatro estaciones depuradoras y en 74 estaciones impulsoras repartidas en el municipio de Calvià. Su uso continuado y, en los últimos años, los atascos provocados por la presencia de toallitas húmedas en la red de saneamiento, provocan averías en esta maquinaria, que es detectada tanto automáticamente -gracias a la red de telegestión instalada en un 60% de las estaciones de bombeo- como por la acción inspectora diaria de los operarios de Calvia 2000.
Mantenimiento de la red de saneamiento
En el área de mantenimiento destaca la actuación del taller mecánico, en el que hasta el 90% de la actividad se dedica a la reparación de las bombas impulsoras. Las de mayor tamaño están en la estación impulsora de Palmanova -seguidas de las de Santa Ponça– en las que se llegan a impulsar hasta 550.000 litros de agua a la hora. Unas 28 personas trabajan en mantenimiento, área que cuenta con un presupuesto anual de 525.000 euros.
A lo largo de los dos últimos años, dentro del objetivo estratégico de “Vertido Cero”, Calvià 2000 ha invertido gran cantidad de recursos en la remodelación de estaciones de impulsión, invirtiendo un total de 1,3 millones de euros. Entre estas actuaciones, destaca la sustitución de las conducciones de agua residual de los bombeos de Santa Ponça 1 y Santa Ponça 2; la reforma integral de la estación impulsora de Magaluf; y la implantación de telegestión en 16 estaciones de impulsión de segunda línea.
