Fue difícil digerirlo, pero todo éxito comienza con un fracaso. Y el del Mallorca fue de grandes proporciones. Después de un dramático descenso a Segunda División B y tras un verano triste, la ilusión ha vuelto a la afición después del buen comienzo del equipo que sueña con volver al fútbol profesional esta temporada. No lo tendrá fácil por el excelso nivel del grupo III, pero, libra por libra como dirían en Estados Unidos, el cuadro bermellón es uno de los mejores de la categoría.
Después de hacer una plantilla completamente nueva tras desprenderse de más de 23 jugadores e incorporar a otros 22, entre los que están seis canteranos, el Mallorca ha empezado como un tiro su nueva etapa en la categoría de plata de nuestro fútbol tras ganar tres partidos y empatar otro en las primeras cuatro jornadas de Liga. Los comienzos no son fáciles y más si necesitas un periodo de adaptación a la categoría, pero el equipo de Vicente Moreno ha demostrado tener mimbres.
En la jornada inaugural se impuso al Peralada en Girona (0-1), en su primer duelo en Mallorca venció (1-0) al Peña Deportiva y el pasado domingo empató sin goles en el derbi balear contra el Atlético baleares. Este domingo 10 de septiembre el Mallorca se ha medido al Atlético Saguntino al que ha ganado 3-2 en un espléndido partido.
Pero más allá de los 10 puntos conseguido por el Mallorca, que invitan al optimismo ya que comenzar bien siempre es positivo, lo que más alimenta la ilusión del cuerpo técnico, y lo acabará haciendo de la afición, es la gran fortaleza del equipo. Porque Vicente Moreno ha logrado crear un bloque compacto que aún no ha encajado un gol en 270 minutos de Liga y que le convierten en el único equipo del grupo III que aún no ha recibido un tanto. Sólo el San Sebastián de los Reyes, Burgos o Barakaldo pueden presumir de estar imbatidos en toda la Segunda División B.
Bonilla, Raíllo, José Ángel y Joan Sastre fueron la pareja de cuatro defensas que jugó de inicio en las victorias ante Peralada y Peña Deportiva; y en el último duelo ante el Atlético Baleares entró Fran Grima en el lateral izquierdo en lugar de Joan Sastre. Esta línea de cuatro protege una portería defendida por el veterano Manolo Reina que llegó este verano procedente del Nástic de Tarragona.
Esta línea supone un motivo para soñar de un Mallorca que quiere volver a la categoría de plata del fútbol español. Junto a Villarreal B, Elche y Hércules, el cuadro bermellón es uno de los favoritos para acceder al playoff final y poder encontrar una plaza final en Segunda División. Según las cuotas de https://www.888sport.es/futbol/, el Albacete es el favorito para dejar una plaza libre en la Liga 1|2|3 que puede acabar ocupando allá por el mes de junio un conjunto balear que tiene como único objetivo el ascenso.
