El Ajuntament de Calvià ha decidido poner en marcha un programa de becas de verano al que destinará 100.000 euros y posponer temporalmente el nombramiento del nuevo Defensor del Ciudadano, dada la situación de crisis por la que atraviesan todas las administraciones.
En estos momentos los responsables municipales consideran más oportuno priorizar otras cuestiones y destinar la partida económica de este departamento, que ronda los 100.000 euros, a ofrecer ayudas a los estudiantes de Calvià a través de un programa de becas de verano, ya que se considera fundamental y prioritario apoyar la educación de los más jóvenes y favorecer su entrada en el difícil mercado laboral actual.
El consistorio remarca que prescindir de manera temporal de los servicios prestados por el Defensor del Ciudadano no perjudicará la atención que reciben los vecinos del municipio, ya que existe un servicio municipal de quejas que, sólo en 2012, respondió millares de sugerencias de residentes y turistas. Además, el ayuntamiento señala que cabe tener en cuenta que la mayoría de los expedientes abiertos en el último año por la defensora del ciudadano, 349 en total, hacían referencia en su mayoría a otras administraciones y no al propio consistorio calvianer.
Así, el ayuntamiento facilitará, en este sentido, la aportación de ayudas económicas para los jóvenes durante los meses de verano, con un programa de becas que ha sido reclamado en numerosas ocasiones por los vecinos de Calvià.
El equipo de gobierno señala, además, que este esfuerzo está en la línea de medidas previstas para dar apoyo a los emprendedores y pymes del municipio, como la creación del Centro Empresarial de Calvià o los programas de voluntariado europeo.
Según los datos del INE, en 2012, el paro juvenil descendió un 10% en el municipio.