El deportista, que a pesar de su juventud ya cuenta con una amplia trayectoria, habla con Diario de Calvià para recordar sus inicios y explicarnos sus retos de futuro.
¿Cómo se inició en el rugby?
Mi padre jugó de joven, y un día iba en el coche junto a él y vimos el típico cartel de promoción que ponía «Juega al rugby». Entonces mi padre me propuso de ir al siguiente entrenamiento y la verdad es que me encantó. Por eso sigo aquí, jugando y disfrutando.
¿Qué fue lo que le atrajo de este deporte en un principio? ¿Lo sigue manteniendo?
Siempre se habla de los valores del rugby, y puede parecer que la gente que jugamos este deporte lo exageramos, pero es que es la verdad. Lo que me enamoró de este deporte fue el compañerismo que hay entre todos los jugadores, y saber que cada vez que vas al campo, ya sea para un entrenamiento habitual o para jugar un partido, te lo vas a pasar bien. Eso es lo que me atrajo de este deporte, y es algo que sigo manteniendo.
¿Hay que tener alguna condición física especial?
El único requisito indispensable es tener ganas de aprender. En este deporte juegan 15 jugadores de condiciones físicas muy diferentes, hay muchas posiciones específicas y se necesitan a personas muy diferentes para ocupar cada puesto. En un mismo equipo te puedes encontrar a jugadores de casi 2 metros de altura y 120 kg, y a otros que miden apenas 17o cm y pesan 70 kg, como es mi caso.
¿Qué opina del dicho «el fútbol es un juego de caballeros jugado por bestias, y el rugby es un juego de bestias jugado por caballeros»?
Como jugador y persona aficionada al rugby, te puedo asegurar que la segunda parte del dicho es totalmente cierta. Respecto a la primera prefiero no responder, hay una gran mayoría de personas aficionadas al fútbol y ellos ya saben como es este deporte.
Para los que no conozcan el rugby, ¿en qué posición juega y qué es lo que tiene que hacer?
El rugby no es como la mayoría de deportes, en este hay posiciones muy específicas y variadas. Durante mi formación he jugado siempre de número 9 o 10, que son los encargados de «dirigir» y organizar el juego, pero estos dos últimos años he estado jugando de número 15, encargándome de cubrir las espaldas del equipo en la defensa e intentando dar las asistencias a los alas (jugadores veloces perfectos para organizar el contraataque).
¿Cómo recuerda sus primeros años en El Toro RC y en el Babarians XV Calvià?
Mis primeros años como jugador en El Toro RC fueron muy bonitos y divertidos, hice grandes amigos que sigo manteniendo a día de hoy, y tuve a los mejores entrenadores que pude tener. En resumen, El Toro RC va a ser siempre mi segunda casa. Aunque ahora juegue en otro equipo y hace ya tres temporadas que no me vista con la camiseta de El Toro RC, mi corazón siempre será blanquinegro. A Babarians XV Calvià llegué ya más mayor, y pertenecer a este equipo allí me sirvió mucho para desarrollarme como jugador. También tengo muchos amigos jugando allí, y espero que este año hagan una gran campaña, que de momento está siendo impecable.
¿Cuando dio el salto a una competición más profesional?
Como he dicho antes, a la hora de empezar la etapa universitaria me fui a Madrid a estudiar y a jugar en el Club de Rugby Complutense Cisneros. Comencé con el segundo equipo, en la liga de segunda división, y tuve la oportunidad de debutar con 18 años en Primera División con el primer equipo.
¿Cuál ha sido el mejor momento de su carrera?
No se si puedo decir que tengo una carrera porque soy aún bastante joven. Pero sí que tengo dos momentos que recuerdo con bastante alegría. El primero fue un campeonato de España que ganamos con la selección balear, que más que una selección éramos un grupo de amigos y el segundo, bastante reciente, es poder haber disputado una final de la Copa del Rey con mi club actual, el Club de Rugby El Salvador.
¿Cómo fue participar en la Copa de SM el Rey?
Nunca me hubiera imaginado poder jugar una final de Copa del Rey. Fue una lástima no ganarla, pero haber tenido la oportunidad de disputarla y haber estado en el partido es algo increíble. Para mi, un sueño cumplido.
Juegas en un deporte minoritario, ¿qué supone esto?
Estos últimos años, el rugby está creciendo mucho en España y es bonito ver como cada vez mas niños eligen jugar al rugby antes que a cualquier otro deporte. Aún así, es cierto que el rugby sigue siendo un deporte clasificado como no profesional en España, y como tal tiene sus desventajas. Recibimos poco dinero, ya sea de ayudas o de otros medios, y son muy pocos los jugadores que pueden vivir de esto, además, la mayoría que lo consigue son extranjeros. Respecto a la competencia, gracias al incremento de nuevas fichas y de jugadores extranjeros que vienen a jugar aquí en los últimos años, ha subido mucho. En primera división y en algunos clubs de segunda ya hay jugadores con participaciones en mundiales y en las ligas mas importantes del globo, esto incrementa la competitividad y la exigencia de estas ligas.
¿Cuál es tu próximo reto dentro del rugby?
Retos como tal no tengo, pero sí que es cierto que me gustaría ganar un título algún año y si es con El Toro RC mejor (risas). Pero por ahora solo me centro en mejorar y en ayudar en todo lo posible a El Salvador a realizar hacer un buen papel durante esta temporada e intentar asentarme como jugador del primer equipo.