Las I Jornadas de Memoria Democrática de Calvià se estrenan este fin de semana con el objetivo de dar luz a las historias de la guerra y la posguerra en Baleares
Las I Jornadas de Memoria Democrática de Calvià comienzan este fin de semana con una programación muy completa. Del 23 al 25 de octubre esta iniciativa intentará, en el marco del segundo aniversario de la apertura de la fosa de Calvià, crear un espacio de reflexión y reivindicación de la Memoria Histórica a partir de estudios de análisis y mesas de debate en torno a los hechos más trágicos del municipio en el último siglo. Por lo tanto, estas jornadas pretenden actuar como una herramienta de recuerdo y reparación, ocho décadas después de algunos de los sucesos más graves y conocidos de Calvià.
Según Rafel Sedano, el teniente de alcalde de Juventud, Participación Ciudadana, Medio Ambiente, Transición Ecológica y Memoria Democrática esta propuesta debe servir para recordar a las personas que sufrieron y murieron en defensa de la democracia con el fin de evitar el olvido de lo que fue realmente tanto la Guerra Civil española como la represión que la siguió. Sedano, pues, apunta que hay que hacer “memoria y pedagogía” de lo que supone una dictadura fascista y confrontar los valores democráticos a la brutalidad totalitaria. “Conocer el pasado para seguir avanzando” indica el teniente de alcalde.
Así pues, la primera edición de estas jornadas se iniciará el próximo 23 de octubre en el edificio juvenil de Es Generador. Allí la doctora Margalida Capellà, experta en la investigación de crímenes contra la humanidad y las desapariciones forzadas de la Guerra Civil española y el franquismo, presentará la exposición Memòries 1936-1939. Por lo que al sábado respecta, la cita será en el teatro Sa Societat de Calvià, donde el historiador Manel Suárez hará una ponencia bajo el título La repressió franquista. Calvià com a exemple, la cual dará paso a la presentación del libro de David Ginard Ateu Martí (1889-1936). Después el antropólogo forense Francisco Etxeberria impartirá la ponencia Verdad formal, verdad real… Verdad oficial y, finalmente, la jornada se cerrará con una mesa redonda de expertos en el tema.
Asimismo, estos tres días dedicados a la reivindicación de la Memoria Democrática e Histórica de Calvià, concluirán el domingo 25 de octubre con una visita al cementerio de Calvià, guiada por Almudena García Rubio, y una visita al cementerio de Porreres guiada por Tomeu Garí. “Intentaré que la gente que venga se haga una idea general de lo que fue la represión de la guerra civil en Mallorca y, concretamente, de la relacionada con el término municipal de Porreres” apunta el investigador, quien también explicará con detalle por qué dirigieron dicha represión hacia Porreres en un momento dado de la guerra. Garí considera que este evento es importante puesto que no se suelen hacer jornadas de estudios locales sobre memoria democrática en muchos municipios de Mallorca.
El investigador cuenta que en general la sociedad sí que conoce nuestra historia, pero no con detalle. Es más, destaca que durante la transición democrática, a partir del año 1978, empezaron a aparecer estudios científicos y de gran investigación sobre la guerra civil y la represión que dan información muy importante sobre estos temas. Garí remarca también que las Islas Baleares es una de las comunidades autónomas con mayor número de este tipo de publicaciones y, además, de gran calidad. “Es importantísimo conocer todos los eventos del pasado ya que ayuda a entender muchas cosas que pasan ahora que, si no son buenas, podrían afectar al futuro de nuestro país” afirma el historiador.
Tomeu Garí cree que, hasta hace muy poco, la gente no era consciente de las desapariciones, los asesinatos y los crímenes que se llevaron a cabo durante la guerra civil y el franquismo, sobre todo en Mallorca. “La gente pensaba que, al ser un territorio pequeño, no había pasado nada durante la guerra civil cuando, en realidad, entre 1700 y 1800 personas murieron víctimas de esta durísima represión” comenta el investigador. Por otro lado, cabe decir que en la isla ha habido personas que han desaparecido porque las han tirado en simas o pozos, personas que han muerto en hogueras, crematorios de hospitales… “Podría contar casos infinitos de la brutalidad represiva que sufrió la población de Mallorca porque se había identificado con los ideales de izquierdas de la segunda república” cuenta Garí.
Teatro
En cualquier caso, ya entrada la noche, el domingo 25 terminarán estas jornadas en el Auditorio de Peguera donde se hará un work in progress de la obra teatral Antígones 2077 escrita por Aina de Cos y dirigida por Montse Rodríguez para mostrar por dónde están llevando el trabajo, puesto que el estreno oficial será en el Teatre Principal de Palma el día 27 de noviembre. Cabe decir que este espectáculo no es una revisión del mito de Antígona ya que no cuentan su historia, sino que se sirven de ella para encauzar la lucha de los personajes femeninos de su obra. Por lo tanto, el título responde al mito por una parte y, por la otra, al número de personas represaliadas durante la guerra y la posguerra en las Islas Baleares según el censo del Govern. Antígones 2077, pues habla del papel de las personas que han perdido a un ser querido durante una guerra, de cómo afrontan la vida que se abre delante de ellas y cómo luchan por saber la verdad de esas muertes, así como también por enterrarlos dignamente.
“Esta obra, al igual que la antigua Antígona, en otras circunstancias, nos habla de la necesidad de cerrar, de despedirnos, de poder decir adiós para poder seguir adelante; también del peso de una verdad desviada en los círculos más íntimos y de los mecanismos de cada uno para tirar hacia delante después de un hecho imposible de olvidar o de superar” señala la directora. Por consiguiente, Antígones 2077 quiere poner luz, abrir y airear aquello que en su momento no se pudo llorar puesto que Antígona no busca obtener una disculpa ni responsabilizar al otro, solo poder descansar en paz. “Coseremos las cuatro historias que Aina De Cos ha escrito uniendo los puntos que tienen en común, gracias al trabajo de cuatro magníficos intérpretes: la misma Aina De Cos, Salvador Miralles, Gypsy Nel·lo Peters y Joan Vila. Con ellos cuatro llevaremos a escena a unos veinte personajes y, para hacerlo, los intérpretes no saldrán de escena durante toda la función” explica Rodríguez.
En cuanto al trabajo de investigación, Aina De Cos lleva elaborando este proyecto desde hace varios años y ha entrevistado a distintas personas que le han contado sus historias sobre su relación con la pérdida de seres queridos represaliados durante la guerra franquista en España. De esta manera, “con el máximo respeto y amor por estas historias” y por todas las que quedan por contar, tanto directora como autora intentan darles luz y voz. “Lo que pretendemos con esta obra es poner en escena una lucha que ya está en la calle y negro sobre blanco encima de las mesas de los despachos gubernamentales: queremos recuperar los cuerpos inhertes de nuestros seres queridos, arrojados en su momento en fosas comunes, y darles un entierro digno como se merecen todos” tilda Rodríguez, y añade “Antígona fue escrita hace 2.500 años y parece que no hemos aprendido o no sabemos reconciliarnos con la urgencia de dejar enterrar”.
Así pues, para evitar que el paso de los años conduzca a la sociedad al olvido de lo que fue realmente la Guerra Civil española, la represión que la siguió y la dictadura que se impuso, en las I Jornadas de Memoria Democrática de Calvià se llevarán a cabo todas estas actividades dirigidas al conocimiento de nuestra historia y al fomento de la memoria democrática del municipio. Por su parte, Tomeu Garí comenta que “posiblemente todavía hay muchas cosas que descubrir” ya que, de hecho, hace unas semanas empezó la exhumación de una nueva fosa. Al fin y al cabo, lo importante es conseguir que los ciudadanos de Calvià sepan de los terribles hechos de nuestra historia reciente, los cuales se deben conocer para entender nuestro presente y para impedir que se repita el pasado. Desde Memoria Democrática pretenden honrar y hacer justicia a todas aquellas personas que murieron o sufrieron cualquier tipo de represión por el hecho de defender la democracia y la libertad, así como también fomentar una cultura de paz y de diálogo democrático.