Los trabajadores de este sector han sido convocados por la plataforma Alerta Roja Eventos para manifestarse el próximo 17 de septiembre en la Plaça Major de Ciutat y pedir soluciones para el mundo de los eventos
Palma se suma a las ciudades que se manifiestan por la supervivencia del sector de los eventos. Los trabajadores de este sector, como promotores, gestores, salas de conciertos, músicos, artistas o proveedores de servicios para eventos, como alquiler de maquinaria, mobiliario o catering, han sido convocados por la plataforma Alerta Roja Eventos para manifestarse el próximo 17 de septiembre en la Plaça Major de Ciutat y pedir soluciones para un sector que «antes de la declaración del estado de alarma del pasado 14 de marzo ya empezaba a sufrir las consecuencias de lo que más tarde se ha convertido en una situación dramática, viendo cómo poco a poco se iban cancelando o aplazando todas las actividades relacionadas, llegando a una total paralización durante los meses de confinamiento», según explican en su manifiesto.
El objetivo de estas movilizaciones, que se darán por muchas ciudades del Estado, es forzar al Gobierno de España y a los Ministerios de Trabajo, Economía, Cultura e Industria «a tomar en las próximas semanas medidas urgentes para paliar la tan dramática situación que ya se está viviendo y de la que han hecho caso omiso». La plataforma explica además que «con la llegada de la “nueva normalidad”, el sector comenzó muy discretamente a reactivarse, permitiéndose la realización de eventos y espectáculos, con estrictas medidas sanitarias y de seguridad, que implicaban una drástica reducción de los aforos, poniendo de manifiesto la clara imposibilidad o la enorme y costosa dificultad de reapertura», y asegura que «con una sociedad realmente preocupada, sumida en una profunda crisis e incertidumbre dados los actuales rebrotes por toda España, se hace patente, y aun a pesar de los esfuerzos del sector por intentar resistir y sobrevivir, que sigue existiendo un claro temor en la ciudadanía que se traduce en una muy baja afluencia a los eventos y espectáculos».