Es la primera cerveza desarrollada por DBB, distribuidora mallorquina de bebidas propias y de otros fabricantes.
Su lanzamiento se acabó de idear y perfilar durante el confinamiento.
Nacida con espíritu luchador, así se define Kinkristo. Kinkristo es la marca de cerveza mallorquina nacida en el peor año de la historia, el año Covid-19. Su concepto venía gestándose de tiempo atrás y con el confinamiento y tiempo para pensar, crear y ejecutar ha salido adelante este ilusionante proyecto.
Es una marca de cerveza 100% mallorquina y artesanal sin conservantes ni aditivos ni estabilizantes. Con ese espíritu de lucha busca hacerse hueco con un concepto y sabores únicos. Frente otras cervezas artesanales Kinkristo es tipo pilsen, con un sabor y una graduación suave y agradable. Xim Frau, gerente de DBB, explica que “Buscamos una cerveza de sabor suave que pueda gustar a cualquier amante de la cerveza, con independencia de sexo o edad”. La cerveza está en fase de lanzamiento y para la segunda producción incorpora ajustes en su composición buscando la cerveza perfecta para cada momento.
Para el diseño se ha buscado que cada ilustración y cada trazo reflejara los valores de la marca, presentando un diseño joven, desenfadado y bien mallorquín.
DBB es la distribuidora responsable del lanzamiento. La empresa ha visto la luz a principios de 2020 con la idea de convertirse en un referente de calidad en la distribución de bebidas en alimentación y restauración en Baleares. Además, cuenta con DBB&co., plataforma de desarrollo de marcas y productos propios con la que ya se han lanzado dos marcas de vinos –Carros i Someres y Fosca negra-, y unas hierbas mallorquinas -Retruc- que rinden homenaje en su nombre y etiqueta al popular juego de cartas mallorquín. De la mano de fabricantes locales se busca la combinación de la máxima calidad y puesta en valor de los productos autóctonos.
