Se acabaron las bromas y las pruebas. La Primera División Balear arranca este mismo fin de semana y lo hace con un Flanigan Calvià que perseguirá, desde el domingo en Ibiza, el sueño de regresar a la Liga EBA. El primer rival del equipo de Carlos López será el Pizzería Carpe Diem Ses Salines (11 horas).
Los calvianers levantaron el Trofeu Biel Hurtado con un pleno de victorias pero todo eso ya no vale. La competición empieza de cero y con el goloso premio para el campeón de Baleares de disputar una final por el ascenso a la Liga EBA ante el campeón de Aragón. Por ello, el Flanigan no quiere relajarse y afronta la liga regular con la responsabilidad que se merecen las expectativas creadas por el equipo.
El arranque de liga llega con las bajas confirmadas de Pau Comas, David Carro y Pedro Cruells que no viajarán a las islas pitiusas por distintos motivos. Sí viajará Xavi Amengual que es duda para este encuentro y que su participación dependerá de las sensaciones previas a la disputas del propio encuentro tras sufrir una tendinitis rotuliana. El resto del primer equipo se encuentra en plenas condiciones para afrontar este primer compromiso regular para el que además contarán con el refuerzo de tres jugadores del equipo filial como son Alejandro Moreno, Sergio Solbes y el ibicenco Miguel Ángel Díaz.
Los dos precedentes entre ambos equipos son favorables a los de Carlos López aunque con historias completamente distintas. En el primer choque, en Galatzó, los calvianers se toparon ante un Ses Salines muy peligroso que puso en peligro el triunfo local teniendo posesión para llevarse la victoria aunque en la prórroga se acabarían imponiendo los mallorquines (95-88). La vuelta fue más tranquila para un Flanigan que se sobrepuso a los saliners por 52-76 en el mismo escenario en el que se disputará este próximo encuentro, el Pavelló de Ca’n Guerxo.
Con el susto del primer partido entre ambos en la memoria de la plantilla azul, el Flanigan Calvià viaja a Ibiza con el respeto que se merece un equipo que está llamado a ser uno de los rivales directos, junto al Ciutat d’Inca, por el título balear.
