Hasta el 31 de octubre se aceptan propuestas para optar a la adjudicación del servicio de poda y saneamiento de las palmeras del término municipal de Calvià.
El contrato contempla actuaciones en 968 ejemplares seleccionados del municipio, 66 palmeras canarias y 902 de otras especies de palmáceas, y tiene como finalidad mejorar la seguridad y contribuir a aumentar el valor ornamental de las palmeras de parques y jardines públicos y alineaciones del término.
El presupuesto base de licitación es de 35.248,18 € (42.650,30 € con IVA), fijando en 45,48€ el precio unitario de intervención en las palmeras canarias (Phoenix canariensis) y en 35,75€ para el resto de las palmeras (Washingtonia y Phoenix dactylifera).
El plazo de ejecución, desde la firma del contrato, finalizará el 20 de diciembre.
[colored_box color=»green»]Procesos de ejecución[/colored_box]
En cuanto a los procesos de ejecución, el consistorio prohíbe en la trepa el uso de las conocidas como espuelas u otro tipo de utensilio o calzado que produzca heridas en el tronco.
La poda de palmeras consistirá, en líneas generales, en la supresión de las hojas, conservando todas aquellas verdes y en buen estado y eliminando las desecadas total o parcialmente, suprimiendo también todas aquellas partes desagradables para la vista.
Asimismo, tendrán que seguirse todas las recomendaciones del departamento de Sanidad Vegetal de la CAIB respecto al picudo rojo en todos los ejemplares de palmera canaria, con la posibilidad de que se extiendan también a las Phoenix dactylifera si fuera necesario. Para todas las especies de Phoenix canariensis se realizará un tratamiento fitosanitario inmediatamente después de la poda.
El contrato obliga a la empresa adjudicataria a eliminar diariamente los restos de material vegetal de podas.
También exige que los trabajos sean realizados por profesionales, por podadores cualificados que conozcan la fisiología de cada especie, así como con la capacidad y experiencia necesarias para poder realizar una inspección visual a cada ejemplar informando de posibles pudriciones, enfermedades, plagas, oquedades, etc.
Los podadores irán provistos de todos los materiales necesarios en materia de seguridad referente a poda. De igual forma señalizarán la zona de trabajo de forma adecuada para no causar daños a los ciudadanos, y no entorpecer la circulación.
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