La obra teatral que denuncia los feminicidios se representará en el Auditori de Peguera este sábado
En el marco de la semana del 25N, el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, se estrena en Calvià una obra teatral que denuncia los feminicidios: Rebota rebota y en tu cara explota. Esta pieza, que se trata de una performance poética, directa e irónica que habla de los asesinatos a las mujeres, se estrena en el municipio el próximo sábado en el Auditori de Peguera. De hecho, ha sido muy alabada por la crítica, pues ganó el Premio de la Crítica 2017 al mejor espectáculo de Nuevas Tendencias, y casi todas las opiniones coinciden en que es impactante, necesaria y contundente. No obstante, a los directores y creadores de la obra, Agnès Mateus y Quim Tarrida, este éxito les resulta agridulce: “El éxito para nosotros es como una contradicción porque se origina en la necesidad de reparación. Que tengan éxito los feminicidios es una paradoja. Pensamos que compartimos la necesidad de denunciar y decir “¡basta!” con la mayoría del público. Y usamos el escenario para decir cosas que en el día a día nos cuesta pronunciar pero que están en la mente de todas y todos”.
En cualquier caso, esta obra va en línea con los anteriores trabajos de los creadores: “Hablamos de violencia policial en nuestro primer montaje juntos Hostiando a M. Ahora hemos hablado de los feminicidios porque es un tema que nos conecta con algo visceral. Esos asesinatos continuados después de tantos años manifiestan el abandono de las mujeres por parte del Estado. Cuando lo miras solo en cifras, o ves la lista de sus nombres una por una, se te remueven las entrañas”. Es más, Agnès Mateus reconoce que ha sufrido miles de pequeñas grandes violencias cotidianas, que considera absolutamente inaguantables y que cree que son el principio de la cadena que acaba en los feminicidios: correr rápido para llegar a casa cuando es de noche huyendo de unos pasos, marcharse de un bar por no querer ligar con un hombre que ha pasado a insultarle después de recibir un no, que la manoseen sin permiso en la calle o en el autobús, cobrar menos por el mismo trabajo por ser mujer, tener que oír comentarios desagradables por la calle, ser tratada de exagerada…
Internacional
Cabe decir que Rebota rebota y en tu cara explota se estrenó en el año 2017 y, desde entonces, no ha parado de rodar por el mundo: Taiwán, Portugal, Francia, Ámsterdam… Es más, los directores siguen sorprendidos con la gran acogida que está teniendo la obra: “Este es el tercer año en el que estamos haciendo esta pieza y nunca nos imaginamos que esto llegaría hasta aquí. Estrenamos a finales del 2017 y en 2018 estalló una nueva oleada de lucha del movimiento feminista de base. Las mujeres salieron a la calle, estalló el #metoo y nosotros estábamos allí”. Lo curioso es que, en todos los países que han representado la pieza, la acogida ha sido igual de buena y no ha habido brecha cultural: “Tristemente, el patriarcado es un sistema de opresión que va de la mano del capitalismo feroz en el que vivimos y, por lo tanto, las violencias contra la mujer son el pan nuestro de cada día en todo el mundo. Cada país tiene sus matices, pero la respuesta de identificación y de empatía con la situación es la misma en todas partes. Es emocionante y aterrador al mismo tiempo. Hemos tenido este feedback desde París hasta Taipei”.
De todas formas, tanto Mateus como Tarrida reivindican que este movimiento no es una moda: “La violencia de género no es un tema para hablar el 8 de marzo y el 25 de noviembre y basta. Se asesinan mujeres a razón de dos por semana en nuestro país. Esto sucede todo el año”. Asimismo, reconocen que, aunque se haya progresado, aún hay infinitas cosas por cambiar: “Hemos avanzado gracias a las mujeres que luchan en la calle, a las que han empezado a decir basta… Y a las otras mujeres que las apoyan y acompañan en esos viajes tan difíciles de denuncia. Hemos avanzado un poco en cuanto a conciencia social y a trabajo de base”. Sin embargo, ambos añaden: “Pero no hemos avanzado nada en cuanto a políticas sociales, sistema judicial o amparo institucional. Las mujeres continuamos solas en esto. El estado español pretende ser un estado modelo en la lucha contra la violencia de género en Europa, y nada más lejos de la realidad”. Sea como sea, el próximo año los directores y creadores de la pieza seguirán dando guerra con esta obra y, en un futuro, seguirán también hablando de la violencia porque “todavía queda mucho por decir”.