Empresarios del sector de la moda aseguran que la venta de chándals a lo largo del año ha crecido en un 800% debido al confinamiento y al teletrabajo
PIMEM considera que las ventas durante el periodo de rebajas están siendo «muy flojas», y según algunos empresarios consultados los datos en comparación al 2020 arrojan la cifra del 62% menos de ventas hasta el momento. Los motivos son diversos y, según el miembro del Comité Ejecutivo de PIMEM y empresario de la moda, Miquel Àngel Mateu. Mateu asegura que “las restricciones, las limitaciones impuestas por la pandemia, incluso el mal tiempo afectan negativamente y provoca que se estén dando hasta cambios en los hábitos de consumo que dan paso a más compras en linia de las que ya solía haber antes de la pandemia”.
Un dato interesante para el empresario y miembro del Comité Ejecutivo son los datos que arroja la compra de chándals y que ayuda certificar los efectos directos del confinamiento y el teletrabajo. Para Mateu “la gente se queda en casa, trabaja desde casa y eso ha provocado que la venta de chándals haya crecido un 800% desplazando otras prendas de ropa que hasta ahora llenaban los armarios de muchas familias”.
Des de PIMEM se ha podido saber la diferencia de la caída de los comercios según su ubicación geográfica. Los establecimientos orientados al turismo y en zonas costeras acumulan una caída del 70% mientras que los de interior se mueven en torno al 52%. Miquel Àngel Mateu también ha señalado que el comportamiento del residente muestra signos de “agotamiento económico” por los efectos de la crisis y la “nula temporada turística”.
Por su parte el presidente de PIMEM, Jordi Mora, ha señalado que ni la campaña de Navidad ha podido dar un poco de “oxígeno” al pequeño comercio y en la misma línea de Mateu señala que “el poder adquisitivo de las familias se ve mermado traduciendo la situación en menos compras y muy selectivas.”