La alta incidencia del coronavirus en la Isla ha hecho que el Govern endurezca las medidas para tratar de frenar una tercera ola en enero
A partir de este jueves Mallorca entra en fase 4. La incidencia acumulada de 336 casos por cada 100.000 habitantes es lo que ha llevado al ejecutivo de Armengol tomar unas medidas mucho más restrictivas que en la fase 3. La más llamativa es que el toque de queda se mantiene también el día de Nochebuena, con lo que las cenas familiares se tendrán que acortar o celebrarse en cada núcleo familiar.
Además, las reuniones sociales serán de 6 personas en interior y exterior con un máximo de 2 núcleos de convivencia en interior. Estas medidas afectarán a Nochebuena, Navidad y segunda fiesta. El día 28 de diciembre se volverá revisar, aunque si la situación no mejora no se prevé la modificación de cara a la fiesta de nochevieja.
La situación de riesgo extremo afecta directamente al sector de la restauración, un sector bastante afectado por la pandemia. A partir de día 17, el interior de los restaurantes estará cerrado y el exterior únicamente con un 75% de capacidad o 6 personas por mesas. Las terrazas consideran que hay un riesgo medio. Bares y restaurantes tendrán que cerrar a las seis de la tarde los viernes, sábados y los vísperas de días festivo.
Otro sector afecto muy de cerca por la pandemia ha sido el cultural. Los espectáculos en teatros y auditorios se reducen al 50% y los cines al 45%, en ambos casos estará prohibido consumir en el interior.
Además de las normas anteriores, el nivel 4 establece:
- Tabaco: prohibido fumar en terrazas, caminando por la calle o con distancia inferior a 2 metros.
- Comercios: 50% de aforo en el pequeño comercio y 30% en las grandes superficies. Los mercadillos podrán exponer el 50% de los puestos.
- Deportes: en espacios de riesgo alto (vestuarios y salas sin ventilación) y de riesgo medio (salas con ventilación y otras instalaciones) se permite el 30% de aforo. En actividades dirigidas y al aire libre un 6 máximo de 6 personas.
- Ceremonias y cultos: se recomiendan aplazarlos, pero en el caso de celebrase, con un máximo de 15 personas o un aforo máximo del 30%.
- Formación no reglada (autoescuelas, academias y otros centros de formación no reglada): aforo del 50% o grupos máximos de 6 personas.
- Residencias: una persona al día podrá realizar la visita durante una hora. Las salidas tienen que ser con carácter terapéutico acompañados por personal del centro. En el caso de final de vida, se podrá acompañar de forma continuada.
- Clubs de gent gran: actividad suspendida
- Ocio nocturno y locales de juego: el ocio nocturno continúa suspendido. Los locales de juego y apuestas tienen que cerrar sus interiores a las 22h.
- Fiestas populares: suspendidas, únicamente se permiten las atracciones.
- Establecimientos turísticos: en espacios comunes, al 50% de aforo. En los comedores, el 30%.
- Ocio infantil y juvenil: En los infantiles, grupos de seis personas o 50% de aforo. En el exterior, máximo seis personas.
- Espacios culturales: aforo del 50%. Para las actividades grupales, 6 personas máximo tanto en exterior como en interior.
- Playas y parques: Abiertos de 7 a 21 horas.
- Congresos: solo en formato telemático.
La presidenta del Govern lo ha explicado en rueda de prensa, acompañada de la presidenta del Consell de Mallorca, Catalina Cladera. «Hemos controlado el avance del virus dos veces, pero ahora nos vuelve a exigir esfuerzos enormes», especialmente por la afectación de la enfermedad en la isla de Mallorca. «No nos podemos permitir relajarnos. Estoy convencida de que responderemos como sociedad como lo hemos hecho siempre», ha asegurado Armengol, recordando la experiencia con la isla de Ibiza, que hace unos meses se encontró con incidencias muy altas, pero donde «las restricciones han dado resultado». «Era la isla más afectada y ahora, como Formentera, es donde mejores niveles presentan».
Armengol ha explicado que las restricciones que se aumentan en el nivel 4 se toman ante la proximidad de unas fechas en las que «hay muchísima movilidad, socialización y aglomeraciones». «Entramos en fase de riesgo extremo —ha incidido Armengol—; no es momento de pensar en celebraciones, sino en cómo nos protegemos. Somos conscientes que tienen un efecto directo hacia las personas y las empresas. Entiendo que es una situación muy dolorosa y trabajaremos para ayudar y acompañar a las personas y empresarios más afectados por estas medidas».
