Un moción de Esquerra Oberta presentada este jueves en el pleno ordinario de noviembre del Ajuntament de Calvià consigue, por unanimidad, que los pequeños designados a las diferentes familias de acogida en el término municipal sean ciudadanos de pleno derecho con su legítimo padrón.
Rafel Sedano, portavoz de Esquerra Oberta, consiguió con su propuesta, incluso, las felicitaciones de la oposición, proponiendo que se permita a estas familias ‘canguro’ empadronar al menor o los menores que tienen en régimen de acogida, con todo lo que conlleva ser ciudadano de pleno derecho.
Actualmente, cada uno de estos jóvenes está empadronado en el Centro de Acogida del Consell de Mallorca al que han sido designados previamente por Menores, pero a partir de ahora pertenecerán legalmente y con todo derecho al municipio en el que residen y en el que están escolarizados.
Una familia de acogida no es la situación ideal para que un niño, una niña, crezcan y se desarrollen, pero hay circunstancias que así lo aconsejan. “El acogimiento familiar es una medida de protección que proporciona un entorno de estimación, ternura, comprensión, atención y dedicación a un niño que lo necesita durante un tiempo determinado. Es una medida temporal para ofrecer a los niños el mejor entorno posible para crecer hasta que su familia resuelva los problemas que le impiden ocuparse”, explica la moción.
“La mayoría de estos niños residen en centros de acogida, dependientes de la administración. Algunos hace tiempo que están. Aunque en el centro reciben la atención, el afecto y la educación de manera integral, necesitan una familia que les ofrezca el entorno afectivo y educativo que les permita crecer en las mejores condiciones”, dice.
Para estos casos, el Consell de Mallorca tiene en marcha diferentes programas, dependiendo de la situación de cada menor. Ser familia de acogida es una opción más que válida para ofrecer y recibir amor, educación y seguridad. Pero al estar empadronados en sedes institucionales, fuera del municipio en el que residen, pierden la posibilidad de acceso a posibles descuentos en servicios municipales, por ejemplo, destinados a las personas empadronadas en Calvià.
Según la unánime decisión del Pleno, eso se va a terminar en Calvià. Los niños son niños, necesitan lo que necesitan (todo) y hay que dárselo (todo), con independencia de su origen, su situación o la transitoriedad de su estado. Un aplauso.
Una información de Blanca Garau