Medi Ambient y SIGRE apelan a la corresponsabilidad ciudadana para avanzar en la gestión de este tipo de residuo
La Conselleria de Medi Ambient i Territori y SIGRE, la entidad sin ánimo de lucro encargada de garantizar la correcta gestión medioambiental de los envases y restos de medicamento que se generan en los hogares, han puesto en marcha, un año más, una campaña de sensibilización para instar la ciudadanía a gestionar correctamente este tipo de residuos.
Bajo el lema ‘Un paso al frente por el medio ambiente’, se apela a la colaboración ciudadana en el reciclaje de medicamentos domésticos, que en los últimos cinco años ha aumentado un 18 % en las Islas Baleares. El año pasado, se incrementó un 2%, cifra que confirma la tendencia ascendente de la conciencia de gestionar correctamente estos residuos.
Un estudio de SIGRE certifica que el 95 % de la ciudadanía del archipiélago está concienciada del daño medioambiental que genera tirar los medicamentos a la basura o por el desagüe. Así mismo, se ha registrado un grado de conocimiento cada vez mayor del punto SIGRE de las farmacias, puesto que un 92% de la población isleña sabe que existen.
El conseller de Medi Ambient i Territori, Miquel Mir, ha querido agradecer la implicación de la ciudadanía en el reciclaje de medicamentos y ha asegurado que «hay que seguir avanzando en la correcta gestión de este tipo de residuos. Todo el mundo tiene su papel dentro de la cadena, pero para que un medicamento no acabe contaminando las aguas o los ecosistemas, el paso primordial tiene que hacerse desde casa».
Por su parte, el director general de SIGRE, Juan Carlos Mampaso, ha asegurado que «la tarea de SIGRE es posible gracias a la colaboración ciudadana y el esfuerzo conjunto de laboratorios, distribución y farmacias. Toda la sociedad tiene que dar este paso adelante necesario y juntar los esfuerzos en la protección de la salud y la naturaleza».
Consejos
Hay que recordar que las Islas Baleares cuentan con 437 puntos SIGRE distribuidos por las farmacias del archipiélago. En estos espacios se tienen que llevar, especialmente:
– El envase vacío – blíster, frasco, tubo, etc, – dentro de su caja siempre que se acaba un medicamento.
– El envase con el resto de medicación que haya podido sobrar al finalizar un tratamiento.
– Al revisar el botiquín. Se recomienda revisarla dos veces al año para detectar aquellos medicamentos caducados o que ya no se necesitan.