Los tres bares, uno en Santa Ponça y dos en Punta Ballena, no cumplían las medidas de protección frente a la COVID-19 y permitían baile, exceso de aforo y público sin mascarilla
El dispositivo extraordinario coordinado por la Dirección General de Emergencias para controlar el cumplimiento de las medidas de protección frente a la COVID-19 cerró ayer tres establecimientos de ocio nocturno en el municipio de Calvià.
Los tres bares y cafés concierto, ubicados en Santa Ponça y Magaluf, superaban los aforos permitidos en interior (un establecimiento lo hacía en un 540%, con 160 personas en vez de las 25 autorizadas) y mantenían las pistas de baile abiertas. El público presente en el momento de las inspecciones no llevaba mascarilla y no respetaba la distancia de seguridad.
Dado que los tres establecimientos ya habían sido inspeccionados en anteriores ocasiones y que los inspectores tenían constancia de reincidencia en la comisión de la infracción, se clausuraron.
Del 9 al 15 de agosto se han realizado un total de 40 inspecciones (30 en Mallorca, 4 en Menorca y 15 en Formentera), de las cuales se han levantado 27 actas (20 en Mallorca, 4 en Menorca, 3 en Formentera).
Desde principios de 2021, el operativo coordinado por la Dirección General de Emergencias, en el cual participan inspectores del Govern y fuerzas y cuerpos de seguridad, incluidas las policías locales, ha realizado un total de 2.604 inspecciones.
