Alfonso Rodríguez Badal admite que le hubiera gustado poder ejecutar aún más política de vivienda en una legislatura marcada por el coronavirus. El alcalde hace así balance en Ràdio Calvià de casi cuatro años de gobierno municipal que terminarán el próximo mes de mayo, con unas elecciones en las que el socialista aspira a lograr su tercer mandato consecutivo al frente del ayuntamiento. Ello a pesar de que, como detalla, se han multiplicado hasta por ocho las ayudas destinadas a la vivienda.
A finales de este mes de febrero tendrá lugar por cierto la entrega de llaves para los adjudicatarios de las 48 VPOs de Magaluf y cree el alcalde que en otoño se podrá hacer lo mismo respecto a las 99 viviendas que actualmente ultiman su construcción en Santa Ponça.
La otra espina que le queda clavada a ARB tiene que ver con la primera línea del Paseo Marítimo de Magaluf. Y es que tras dos años de tiras y aflojas con el ministerio, finalmente el consistorio se ve obligado a dar marcha atrás en su proyecto original, que ganaba algo más de un metro a la playa, y empieza de cero la planificación de unos trabajos cuya 1a fase se pondrán en marcha, según los cálculos del alcalde, en noviembre de 2023.
Rodríguez Badal se ha referido también a la salida de Consuelo Fernández de Cs que deja sin representación a un partido que empezó la legislatura con dos regidoras, ambas ahora formando parte, por separado, del pleno como regidoras no adscritas: Gael Thyus, que será nº 2 del PI en las elecciones de mayo, y Fernández, que apunta a formar parte de las listas del PP que encabeza Juan Antonio Amengual. En todo caso dice el alcalde que prefiere no valorar cuestiones internas de otros partidos:
La entrevista se puede recuperar de forma íntegra en las redes sociales de la emisora pública municipal.
