El pleno de junio del Ajuntament de Calvià tuvo este jueves muchos tintes, y muy diversos. Además de la inquina manifiesta entre las bancadas y del receso que tuvo que hacer el alcalde, Alfonso Rodríguez Badal, llamando al orden a los portavoces para reunirlos en su despacho y pedirles mesura, finalmente se aprobaron muchas cosas.
La primera aprobación, con diferencias entre fondos norte y sur, por supuesto, fue poner el nombre de Felipe VI a la plaza de Palmanova que se conoce popularmente por ‘Amadip-Esment’, dado que en ella se encuentra la entidad socio cultural y no tiene denominación oficial.
A consecuencia de la solicitud presentada por la Hermandad Nacional Monárquica de España, Delegación Provincial de Baleares, acompañada de más de 300 firmas de residentes en Calvià, y dado que el procedimiento ha sido correcto, se aprueba la propuesta.
A pesar de todo, se conforma de manera general que hay otras personalidades locales que merecen tal reconocimiento.
Sa Societat
Desde que el anterior consistorio ‘reconvirtiera’ el local de Sa Societat en un local con máquinas expendedoras en vez de su servicio de bar tradicional, punto de reunión de muchos, los vecinos han solicitado la devolución del uso, tanto del local social como del teatro.
La propuesta del equipo de gobierno, finalmente aceptada tras el rifi-rafe previo a los toques de atención del alcalde, pasa por la creación de un organismo de gestión directa mediante un órgano ‘desconcentrado’ de fundaciones, e, inicialmente, unos estatutos que lo regulen. La Sala reconoce que sus legítimos dueños “fueron ilegítimamente despojados de Sa Societat, por lo que se propone recuperar el espacio como local social y las funciones de su teatro”.
Tras el primer turno de réplicas, el teniente de alcalde Andreu Serra le reclama al portavoz popular, José Manuel Ruiz, “que vuelva a insistir en enterrar en el silencio la ley de memoria histórica y la voz de los Hereus”, dice que el PP quiso enterrar el pasado cambiando y maquillando lo sucedido durante la Guerra Civil, y que “incluso cambiaron el cartel para privar a Sa Societat de su historia y de su realidad”.
Rafel Sedano, de Esquerra Oberta, dice por su parte que “lo único que se debe discutir es la figura que va a regir el ente, ya sea la de Fundación u otra más acorde, y qué entidades van a participar en su gerencia, no la necesidad de retornar el patrimonio a los dueños legítimos, porque “eso es necesario e indiscutible, igual que la memoria histórica”.
El alcalde Rodríguez Badal dice que a Calvià Vila “se la expropió de Sa Societat en la Guerra Civil y que el PP se lo volvió a expropiar sin miramientos”. Por tanto, se aprueba con las abstenciones de PP y el portavoz del Grup Mixte, Carles Tarancón. Así que pasa a exposición pública para que todas las asociaciones, agrupaciones, entes, entidades y personas físicas puedan hacer sus aportaciones.
Una información de Blanca Garau