La patronal exige al ejecutivo central que incluya en su próximo paquete de medidas económicas un plan de rescate específico, con inyección de liquidez directa, para salvar sus empresas
Un año después de que estallara la crisis del coronavirus, el ocio nocturno de las Islas Baleares sigue siendo un sector duramente golpeado por la pandemia. Según Abone, las pérdidas ascienden ya a los 234,525 millones de euros y la caída en la facturación cifrada en 1.527,12 millones de euros. De hecho, después de 12 meses de cierre, por imperativo legal, y de acuerdo con los últimos datos del Estudio de Impacto del Coronavirus en el Ocio Nocturno y los Espectáculos, realizado por la Asociación Balear de Ocio Nocturno y Entretenimiento (ABONE), junto con la patronal España de Noche, han cerrado ya un total de 493 locales de ocio en las Islas Baleares; es decir, el 32,86% de los 1.500 que existían en marzo de 2020.
Además, el mismo estudio señala que «su capacidad de resistencia se encuentra al límite, por las pérdidas acumuladas y por el retroceso en la facturación de más del 84%» Unas cifras que sitúan al 69,4% de las pymes del ocio y los espectáculos de las Islas Baleares «al borde de la quiebra», según la asociación.
La patronal exige al ejecutivo central que incluya en su próximo paquete de medidas económicas un plan de rescate específico, con inyección de liquidez directa, para salvar sus empresas. Al respecto, ABONE denuncia «el abandono del sector del ocio nocturno por parte de las administraciones, siendo las ayudas insuficientes cuando hablamos de entre 1500 y 3000 euros por establecimiento por parte del ejecutivo autonómico». Sin embargo, recalcan, «sí se han suspendido los aplazamientos del pago de impuestos por la imposibilidad de conseguir nuevos avales, por lo que los apremios y embargos del Ministerio de Hacienda se acumulan para las pymes sin ningún tipo de ingresos, y a las que se les sigue reclamando puntualmente el pago de sus obligaciones fiscales y cotizaciones sociales, además de tasas municipales de servicios que no reciben».
Iniciativa
En este contexto, ABONE, coincidiendo con la conmemoración del primer año del cierre de los primeros locales decidido por los propios empresarios, y cuando el toque de queda tiene prohibida la actividad nocturna en las ciudades españolas hasta el 8 de mayo, ha puesto en marcha una nueva acción reivindicativa bajo el lema “UN AÑO CERRADOS, ¡RESCATE YA!” para exigir una compensación económica urgente y denunciar los principales problemas provocados por las escasas ayudas existentes.
En este sentido, el barómetro realizado por España de Noche, y en el que ha participado la Asociación Balear de Ocio Nocturno y Entretenimiento, revela que el principal problema de las ayudas son los criterios establecidos para poder beneficiarse de las mismas, teniendo en cuenta que se están dejando fuera todas las empresas que tienen deudas con Hacienda después de 12 meses sin tener capacidad hacer frente a los pagos. En segundo lugar, para los encuestados, las ayudas económicas son insuficientes y no cubren ni el 2% de las pérdidas de las empresas. En tercer y último lugar, otro de los grandes problemas son los recursos y energías que tienen que destinar los pequeños y más vulnerables establecimientos para acceder a ellas.